Si los bancos crean dinero suficiente nuevo y lo bombean a la economía a través de préstamos personales y tarjetas de crédito, pueden causar un ‘boom’ que crea puestos de trabajo y anima a las empresas a expandirse. Pero debido a que estos auges son alimentados por el aumento de la deuda personal en lugar de por el aumento de los ingresos, tarde o temprano terminan, y cuando lo hacen se produce una recesión que hace que las empresas quiebren y que las personas pierdan sus puestos de trabajo. El sistema monetario actual es malo para los negocios y el empleo.
1. LA CREACIÓN DE DINERO POR LOS BANCOS CREA UN AUGE ARTIFICIAL
Los auges económicos pueden ser alimentados por gente que gasta dinero que ha pedido prestado, mientras tanto cada nuevo préstamo va creando dinero nuevo. Creando dinero de esta manera, los bancos duplicaron la cantidad de dinero en los 10 años previos a la crisis financiera. Cuando se está creando e introduciendo en la economía tanto dinero nuevo, se tiene la sensación de que todo el mundo es cada vez más rico – el precio de la vivienda aumenta, dando lugar a un sentimiento de aumento de la riqueza (y por lo tanto del gasto) entre los propietarios de viviendas. Mientras tanto el acceso fácil al crédito anima a la gente a gastar dinero que no tienen. En consecuencia las empresas venden más, asumen más personal, y pueden pedir prestado más para expandir.
2. AL FINAL LA DEUDA SE CONVIERTE EN EXCESIVA Y EL BOOM SE CONVIERTE EN COLAPSO
Todo ese dinero recién creado tiene que ser reembolsado. El gasto en la economía disminuye a medida que una parte cada vez mayor de los ingresos de las personas es absorbida por los reembolsos de la deuda. Pero aún es peor, ya que este dinero fue creado por los bancos, cuando se devuelve desaparece. No recircula o es reinvertido: literalmente desaparece. Si los bancos no hacen nuevos préstamos para reemplazar este dinero, la oferta monetaria se reduce. Una menor cantidad de dinero en circulación conduce a una menor demanda de bienes y servicios, lo que nos lleva a la recesión.
Durante cualquier ciclo económico, bien termine en una recesión financiera o simplemente en una recesión normal, hay una relación muy fuerte entre el crecimiento del crédito (en relación con el PIB) en la fase ascendente, y la profundidad de la caída posterior en el PIB en el fase descendente. Taylor, A. M. (2012). «El gran apalancamiento». Oficina Nacional de Investigación Económica.
3. LA INESTABILIDAD ES MALA PARA LAS EMPRESAS
Es difícil llevar bien una empresa cuando el sistema bancario causa recesiones cada pocos años. Incluso empresas que están bien gestionadas pueden ir a la quiebra simplemente debido a una crisis financiera o recesión causada por el sistema bancario. La mayoría de las empresas necesitan una economía estable, de manera que puedan crecer de manera constante, en lugar de los ciclos de auges alimentados por la deuda y seguidos de colapsos.