1️⃣ El dinero seguro… que no podemos tener
Una de las paradojas del sistema monetario actual es que la ciudadanía no puede tener dinero digital verdaderamente seguro.
Aunque los billetes y monedas están respaldados directamente por el Banco Central Europeo (BCE), la mayor parte de nuestro dinero —más del 90 %— no son euros del BCE, sino promesas de pago de los bancos comerciales.
Es decir, cuando vemos “1 000 €” en nuestra cuenta, no tenemos un depósito en el banco central, sino un pasivo del banco comercial. Este dinero bancario privado está respaldado parcialmente por las reservas que los bancos mantienen en el BCE, pero no es lo mismo que un euro emitido directamente por el banco central.
2️⃣ La normativa de dinero electrónico: una oportunidad parcial
La Directiva 2009/110/CE, transpuesta en España mediante la Ley 21/2011, de 26 de julio, de dinero electrónico, abrió la puerta a que empresas no bancarias pudieran emitir medios de pago digitales.
Estas entidades de dinero electrónico (EDE) ofrecen servicios de pago, tarjetas, monederos digitales o aplicaciones móviles que permiten guardar y transferir fondos.
Sin embargo, la normativa fue clara:
“Las entidades de dinero electrónico tendrán acceso a los servicios de cuentas de pago de las entidades de crédito…”
(Artículo 16 bis, Ley 21/2011)
Y también:
“El dinero recibido a cambio de dinero electrónico se salvaguardará mediante su depósito en una cuenta separada abierta en una entidad de crédito o mediante su inversión en activos seguros y líquidos.”
(Artículo 10, Ley 21/2011 y Real Decreto 778/2012, de 4 de mayo)
En otras palabras, estas entidades no pueden tener el dinero directamente en el Banco de España.
Tienen que depositarlo en un banco comercial, lo cual mantiene el riesgo de intermediación: si el banco quiebra, aunque el dinero esté “salvaguardado”, el riesgo no desaparece por completo.
3️⃣ Reservas bancarias: el dinero que solo los bancos pueden tener
Las llamadas “reservas” son los depósitos que los bancos comerciales mantienen en el banco central. Son el dinero más seguro que existe en la economía moderna: euros creados directamente por el BCE, que no pueden quebrar.
Pero solo unas pocas instituciones pueden tener acceso a esas cuentas en el banco central:
- los bancos comerciales,
- los tesoros nacionales,
- los otros bancos centrales, y
- algunas infraestructuras de pago del Eurosistema.
Ni las entidades de dinero electrónico, ni las empresas, ni la ciudadanía tienen ese privilegio.
4️⃣ El cambio que se prepara: el Eurosistema abre la puerta
En julio de 2024, el Eurosistema (que agrupa al BCE y a los bancos centrales nacionales) publicó un documento crucial:
“Eurosystem policy on access by non-bank payment service providers to central bank operated payment systems and to central bank accounts.”
En él, el BCE reconoce que los proveedores de servicios de pago no bancarios —incluidas las entidades de dinero electrónico (EMIs)— podrán, bajo ciertas condiciones, acceder a cuentas en bancos centrales.
Cito textualmente:
“The Eurosystem has decided to establish a harmonised approach to granting non-bank payment service providers access to payment systems operated by central banks and, subject to risk-mitigation measures, to central bank accounts for safeguarding purposes.”
(BCE, julio 2024)
La decisión final queda en manos de cada banco central nacional. Pero por primera vez, el BCE abre la posibilidad de que entidades no bancarias guarden fondos directamente en el banco central.
Esto significa que, en el futuro, una entidad de dinero electrónico podría custodiar el dinero de sus clientes directamente en el Banco de España, eliminando el riesgo de intermediación bancaria.
5️⃣ ¿Qué implicaría tener dinero directamente respaldado por el banco central?
Si esta posibilidad se generalizara, tendría consecuencias estructurales:
🧱 a) Fin del riesgo de crédito bancario para el dinero de pagos
El dinero electrónico custodiado en el banco central no dependería de la solvencia de un banco comercial.
Sería, de facto, dinero del banco central en formato digital minorista, aunque gestionado a través de intermediarios autorizados.
⚖️ b) Mayor estabilidad financiera
Durante crisis bancarias, el dinero respaldado al 100 % por reservas del banco central no estaría sujeto a corridas bancarias.
Los usuarios no tendrían incentivos a huir hacia billetes o hacia otros bancos por miedo a la quiebra.
💡 c) Innovación con dinero seguro
Las fintech y entidades de dinero electrónico podrían ofrecer servicios modernos de pago y ahorro con el mismo nivel de seguridad que el BCE ofrece a los bancos.
🕊️ d) Un paso hacia el euro digital público
Permitir que los ciudadanos y empresas mantengan fondos directamente en el banco central —ya sea a través de EDE, stablecoins (si se cambiara MiCA) o mediante un euro digital público— democratizaría el acceso al dinero seguro y devolvería al banco central su papel originario: garantizar la estabilidad del dinero, no de los bancos.
6️⃣ El debate político y monetario: ¿de quién debe ser el dinero?
En Dinero Positivo llevamos años defendiendo que el dinero debe ser un bien público.
No puede ser que la única manera de participar en la economía digital sea confiando nuestro dinero a entidades privadas cuyo modelo se basa en crearlo fundamentalmente respaldado en deuda o activos con riesgo.
Los recientes cambios regulatorios muestran que incluso el BCE empieza a reconocer la necesidad de replantear el monopolio bancario sobre las reservas.
Permitir que entidades de pago o dinero electrónico mantengan cuentas en el banco central sería un paso intermedio hacia un sistema más estable y transparente, donde cada euro digital esté verdaderamente respaldado por el banco central, no por una promesa de un banco comercial.
7️⃣ Referencias oficiales
- Ley 21/2011, de 26 de julio, de dinero electrónico — BOE-A-2011-12909
- Real Decreto 778/2012, de 4 de mayo, por el que se desarrolla la Ley 21/2011 — BOE-A-2012-5993
- Circular 5/2020 del Banco de España, sobre información financiera de entidades de pago y de dinero electrónico — BOE-A-2020-15632
- Eurosystem Policy on Access by Non-Bank Payment Service Providers, BCE, julio 2024 — ecb.europa.eu
- Banco de España, sección “Entidades de dinero electrónico” — bde.es
8️⃣ Conclusión: un anticipo del dinero público digital
La evolución normativa y las nuevas políticas del Eurosistema apuntan a algo mayor: el nacimiento de un dinero digital verdaderamente público, gestionado o intermediado por actores diversos, pero respaldado directamente por el banco central.
Esto no es solo un cambio técnico.
Es una transformación profunda del concepto mismo de dinero y de soberanía monetaria.
Y si se hace con visión democrática, puede ser el paso decisivo hacia un sistema donde el dinero sirva al bien común y no al beneficio privado. Pidámosle al Banco de España que abra esta posibilidad en nuestro país y así genere competencia en el sistema de pagos.
Dinero Positivo
Por un sistema monetario justo, transparente y al servicio de las personas.
