Medio Ambiente

No es evidente en qué medida el sistema económico actual contribuye a la destrucción del medio ambiente y al consumo acelerado de recursos, y no pretendemos tener todas las respuestas, pero hay algunas observaciones que queremos hacer

1. LAS RECESIONES HACEN QUE LA GENTE Y LOS GOBIERNOS SE PREOCUPEN MENOS POR EL MEDIO AMBIENTE

Una relación directa entre el sistema monetario actual y el medio ambiente es el efecto que las recesiones tienen en la regulación e inversión en medio ambiente en el largo plazo. En una recesión, es común escuchar el argumento de que los costes para las empresas son demasiado altos debido a las regulaciones medioambientales, y que la relajación de esta normativa permitiría a las empresas crear empleo.

Aunque la validez de este argumento es discutible, se propaga por los que creen que es verdad, por aquellos que ven la recesión como una oportunidad para reducir sus costos, y por los que nunca han creído que esas regulaciones fueran necesarias. Mientras que los beneficios de las regulaciones ambientales se acumulan en el largo plazo, las posibilidades de reelección del gobierno por lo general dependen de la salud de la economía a corto plazo. Por lo tanto los beneficios ambientales a largo plazo a menudo resultan perdedoras respecto a las consideraciones políticas y económicas a corto plazo.
2. EL SISTEMA MOMETARIO ACTUAL PUEDE DAR LUGAR A LA NECESIDAD DE UN CRECIMIENTO ECONÓMICO CONTINUO

Hay 4 formas en las que el sistema monetario deriva en la necesidad de un crecimiento económico continuo:

  • Amortizaciones de deuda: ya que los préstamos tienen que ser reembolsados a plazos en fechas fijas, las personas están incentivadas a realizar actividades que proporcionan resultados rápidos. La gente paga sus deudas mediante la producción de más bienes y servicios. Los niveles más altos de deuda incentivan mayores niveles de crecimiento.
  • Se producen burbujas de precios de activos debido a que los bancos crean dinero a través de préstamos para activos con los mayores niveles de retorno, por ejemplo en vivienda. A fin de mantener el nivel de vida cuando se enfrentan a un aumento en el costo de los elementos esenciales, por ejemplo el alquiler, las personas deben o trabajar más con el fin de pagar los precios más altos, o pedir prestado más para compensar la diferencia. Tanto los préstamos como el incremento del trabajajo aumentan el crecimiento económico.
  • La amortización de préstamos: cuando los préstamos se reembolsan el dinero se destruye y la oferta monetaria se contrae. En general, esto se traduce en una recesión que se auto-refuerza. Para evitar esto, se necesita crear nuevos préstamos simultáneamente, aumentando la necesidad de crecimiento.
  • El endeudamiento en la sociedad es responsable de aumentar la actividad económica, ya que las personas tienen dificultades para pagar los intereses de su deuda. En otras palabras, la deuda impulsa el crecimiento.

¿POR QUE LOS ECOLOGISTAS ESTÁN PREOCUPADOS POR EL CRECIMIENTO ECONÓMICO?

Los ecologistas están preocupados por el crecimiento económico, ya que siempre se ha correlacionado directamente con un mayor consumo de recursos y la generación de contaminación. Un ejemplo claro puede ser proporcionada por el gráfico siguiente que trata de la producción de CO2 respecto al crecimiento. Mientras que esto condujo a mucho más altos niveles de vida en los primeros 100 años desde la revolución industrial, los ecosistemas están ahora en el punto de colapso y estamos alterando el clima hasta un nivel peligroso por la quema de combustibles fósiles.

La única forma de evitar este dilema es si el crecimiento económico se puede disociar del consumo de recursos y de las emisiones de gases de efecto invernadero. La disociación puede ser relativa, siendo más eficientes por unidad de actividad, o bien absoluta, reduciendo sustancialmente las emisiones. Ya que la disociación relativa sigue dando lugar a un aumento general en el volumen de material o de emisiones utilizados y producidos, sólo la disociación absoluta podría permitir que el crecimiento económico prosiga de manera sostenible.

Hay muchas evidencias de disociación relativa y los datos muestran que estamos utilizando menos recursos y energía, y generando menos contaminación por unidad de actividad de lo que estábamos hace 25 años. Pero no hay evidencia de disociación absoluta a nivel de sistema. De hecho, la tendencia general es la de un mayor uso de la mayoría de nuestros recursos (Prosperidad sin crecimiento, Tim Jackson).

Hay retos muy reales a los que se enfrenta el mundo en las próximas décadas, incluyendo probables crisis en la producción de alimentos, el clima, la energía y los recursos naturales (como el agua). Para centrarse en hacer frente a estos desafíos extremos, es esencial que tengamos un sistema monetario estable y no nos distraigamos con las crisis financieras causadas por el diseño del sistema actual. El sistema monetario, que está hecho por el hombre y es poco más que una colección de normas y de sistemas informáticos, es fácil de solucionar, una vez que se tenga la voluntad política y se supere la oposición de los intereses creados. Los verdaderos desafíos de cómo proveer para una población mundial en constante crecimiento, el cambio climático, y los recursos naturales cada vez más escasos, requieren un sistema monetario que trabaja para la sociedad y la economía en su conjunto. Por esa razón, nuestro sistema monetario actual ya no es adecuado para ese propósito y debe ser reformado.