OBSTÁCULOS PSICOLÓGICOS
Además de la fobia a la inflación, existen otros obstáculos de naturaleza psicológica que bloquean la creación de un nuevo sistema financiero. Las personas y las sociedades son contrarias al riesgo y por tanto son conservadoras: hay resistencia en cambiar a algo nuevo. La precaución es incluso mayor si las cosas van relativamente bien, lo que sucede en los países desarrollados incluso a pesar de la crisis. La voluntad de cambiar es menor si no hay una buena alternativa, o si hay sospechas de “demasiado bueno para ser cierto”, como sucede con la creación pública de dinero.
Para superar dichos obstáculos es importante reflexionar acerca de la naturaleza del dinero. Debemos recordar que el dinero es simplemente un símbolo que sirve como lubricante de la economía. Podemos hacer todo el dinero que queramos dentro de los mencionados límites de mantener la confianza y la proporción con la capacidad productiva.
INFLUENCIA DE LOS BANCOS: DINERO ES PODER
Existe otro factor que se opone a la reforma del sistema monetario: los intereses del sector financiero. Los grandes bancos tienen una enorme influencia política, que usan para promover legislación favorable a sus intereses. En un país como Estados Unidos existen puertas giratorias entre el gobierno y los grandes bancos: los altos cargos del gobierno provienen de estos bancos, especialmente de Goldman Sachs, y tras su paso por el sector público vuelven a esos bancos. Por tanto, los intereses de los grandes bancos privados están fuertemente representados en el corazón del gobierno.
En el caso británico, el sector financiero es tan importante (La City) que el gobierno británico está haciendo todo lo que puede para bloquear las medidas europeas encaminadas a controlar algo más a la banca. El dinero es poder, y la capacidad de crear dinero incrementa el poder del sistema financiero.
The prime example is the UK, where the financial sector (“The City”) is of such importance to the economy that the British government is doing everything it can to block European measures to get a somewhat greater hold on the banks. Money is power, and the ability to create money only increases the power of the financial sector.
EL DOGMA ECONÓMICO PROTEGE AL SECTOR FINANCIERO
Es de esperar que los bancos hagan todo lo posible para bloquear una reforma del sistema monetario en la cual perderían los beneficios ligados a la creación del dinero. Pero los bancos son afortunados, ni siquiera tienen que luchar contra esta reforma, ya que cuentan con la ciencia económica: el convencimiento de los economistas, y tras ellos los políticos y periodistas, de que sólo el mercado puede determinar la cantidad correcta de dinero. El dogma económico actual no sólo idealiza la infalibilidad del mercado, sino que es escéptico respecto al gobierno. Por tanto, los practicantes de la economía convencional, de forma consciente o inconsciente, forman la primera y formidable barrera de defensa contra el cambio.